Kimi kara Uketsugu Brave Chronicle – Interludio (1)

Interludio
En la Noche cuando los Destinos Colisionan

Yo estaba en medio de un sueño – un sueño que siempre terminaba con una oración en particular.

Voy a matarte.

Sed de sangre negra como tinta. Me sentía como si fuera a destruir mi mente por completo.

*

Hoy es el mejor día de todos, sin embargo, mientras despertaba y observaba lo que había sido dejado por mi almohada.

Un videojuego popular y una espada. Era 25 de diciembre, mañana de Navidad. Un armamento estelar y un videojuego. Santa… eh, Papá debe haberlos puesto allí mientras estaba durmiendo.

Por supuesto, yo sabía que Santa Claus había sido Papá todo el tiempo. Después de todo, ya tenía 6 años de edad (NT: qué clase de santa regala armas a niños de 6 años). Papá había estado actuando muy nervioso, preguntándome acerca de que clase de cosas eran populares para los niños estos días, y todas las publicidades de juegos y juguetes que había estado leyendo mucho últimamente.

Yo no hubiera sido capaz de relacionarlo si tuviera cinco, pero ahora era un niño con seis años completos, un anciano en el mundo del jardín de niño. Mi hermana de 5 años Towa probablemente seguía creyendo que santa era real, pero como su hermano mayor y anciano, no iba a romper sus ilusiones.

Primero, recogí el videojuego. Le había dicho a mi papá acerca de cómo era muy popular entre todos mis compañeros de clase. No podía esperar para jugarlo. Yo lo quería en verdad desde hace mucho así podría jactarme con mis compañeros.

Pero eso habría de esperar. El verdadero regalo estaba puesto justo al lado… la espada. Hablando acerca de un Santa generoso – no uno, dos regalos. Papá probablemente consideró la espada como el verdadero regalo, pero él era lo suficientemente cariñoso para darme lo que le había pedido, también. Yo hubiera sido más que feliz solo con la espada, y me sentí verdaderamente agradecido con mi generoso Santa – eh, Papá. Sosteniéndolo, podía sentir el peso del armamento estelar permanente de entrenamiento, y mentalmente le envié mis agradecimientos.

Gracias, Papá… voy a agradecerte apropiadamente más tarde. Oh no, espera, no puedo dejar que sepa que me di cuenta que Santa en realidad es él.

«¡Mira, hermano! ¡Mira, mira!»

Repentinamente, mi puerta estrepitosamente se abrió, y una criatura de tono oscuro entró. Por alguna razón, su voz sonaba justo como la de mi hermanita.

«Whoa…» casi alzo mi nueva espada al aire. Pero justo antes de que pudiera hacerlo, me di cuenta de que esa cosa negra era un animal de peluche… y uno feo, además. ¿Qué era eso? ¿Un perro? ¿Un oso?

«¿Towa que está pasando?»

«¡Mira! ¡¿Lo ves?!» Towa se asomó de detrás del gran y feo animal de peluche.

«Sí puedo verlo. Es realmente… grande…» no era tan grande como ella, pero estaba cerca.

«¿No es grande? ¿Y lindo?»

«S-Sí… super adorable.»

¿Lindo? ¿En serio?

«¿No piensas que luce un poco como tú?»

«¿Uhh…?»

Ladeé mi cabeza y observé esa ridículamente grande, negra cosa una vez más.

Honestamente no tenía idea que era, pero parecía ser bizco como si estuviera cansado o enojado, y su rostro no se veía ni remotamente lindo. Aun así ella dijo que lucía como yo. Si realmente lo hacía, entonces eso era algo deprimente.

«Tienes razón, en verdad luce exactamente como yo. ¡Incluso es justo igual de atractivo!»

«¡Sí! ¡Santa en verdad tiene buen gusto!»

«Seguro lo tiene.»

Observé la cara del animal de peluche. Mamá debe haberlo escogido. Sus gustos siempre eran un poco… extraños. Y Towa era exactamente como ella, así que no era asombroso que lo adorase.

«¡Voy a enseñárselo a mamá y papá!» gritó Towa, mientras se precipitaba fuera de la habitación.

«¿Vas a llevar esa cosa tan grande contigo? ¡No te vayas a tropezar!»

«¡No lo hare!» Towa contestó alegremente. Aun me sentía un poco preocupado, así que fui detrás de ella.

Me imaginé que mamá y papá estarían en la mesa de cualquier manera, y necesitaba hacerles saber que yo estaba agradecido por lo que Santa me había traído.

«Buenos días, Kokuya. ¿Recibiste una visita de Santa?» Al momento que papá me vio, él sonrió y me preguntó eso. Él en verdad se estaba haciendo el tonto.

«Buenos días. ¡Puedes apostar a que si! ¡La próxima vez que veas a Santa, dile que es el mejor, y dale un gran agradecimiento!»

«Oh, bien, me alegro. Bien, se lo haré saber. Apuesto que él estará feliz de escucharlo. Fuiste un buen chico todo el año, así que no me sorprende.»

«¿En verdad?»

«Y parece como si hubieras estado trabajando duro en tu entrenamiento últimamente.»

«Supongo. Pero aún tengo que recorrer un largo camino. ¡Oh si, el regalo! Quería probarlo, ¿puedes ayudarme entrenando un ratito?»

«Hmm. Tu madre y yo necesitamos ir al laboratorio… así que supongo que podemos hacerlo en el lugar de siempre.»

Mamá y Papá ambos eran magos estelares investigadores. Mamá se enfocaba en el desarrollo, mientras que Papá investigaba con ella probando los nuevos armamentos estelares que hacían. Él era realmente fuerte. Y me enseñó que los magos estelares luchan para proteger el mundo y todos los que están en él.

Sentía como si Papá me hubiera enseñado más que eso… básicamente, los magos estelares eran geniales, fuertes, asombrosos, y exactamente lo que quería ser. Quería convertirme en un mago estelar de clase alta, justo como Papá.

«¿Vas a venir al laboratorio también, Kokuya? Deberíamos solo llevar el pastel y tener la fiesta allí,» dijo mamá.

«¿Huh? ¿Hay un pastel?»

«Bueno, es Navidad, después de todo. ¡Me aseguré de hacer uno grande!»

«¡Yaaay! ¡Pastel!» Towa celebró con una voz infantil. Honestamente, yo quería hacer lo mismo.

«¿Esta bien llevar a Towa al laboratorio?»

«Me imagino que va siendo tiempo que midamos su poder estelar de cualquier forma.»

«Oh, cierto. Ella irá la escuela primaria el próximo año, ¿cierto?»

Los niños que anhelaban ser magos estelares todos tenían su potencial medido antes de los seis. Yo tenía el mío medido también, pero…

«Cuando vi tus resultados, Kokuya, casi me caigo de la silla,» dijo Papá.

«¡Cállate! Solo es el potencial. No significa nada. Ya decidí que voy a convertirme en un mago estelar sin importar qué.»

«¡Ese es el espíritu!»

Yo difícilmente tenía ningún poder estelar del que hablar. Ellos incluso me dijeron que debido a cierta deficiencia crítica, yo podría no estar en condición de convertirme en un mago estelar después de todo.

«Además de esto, fuimos todos básicamente igual comparados con personas como los Yukiganes. No estoy preocupado. Yo solo quiero heredar tu fuerza, Papá.»

«Bueno, sí… Bien. Si ese es el camino que has decidido, entonces está bien para mí.»

La casa Yukigane era una especialmente distinguida familia de magos estelares.

Ellos tenían una hija que tenía la misma edad que yo, aun así, ella era más fuerte que cualquier mago estelar adulto.

…Yo podría no estar capacitado para derrotarla ahora, pero lo haría algún día. Incluso aunque en realidad nunca la conozca… si ella en verdad es así de fuerte, entonces estoy seguro de que me cruzare con ella eventualmente.

*

«Creo que es suficiente por hoy.»

«… Yo no… acabo… todavía…» Intenté decir eso mientras yacía en el suelo boca arriba. No estaba seguro de cuánto tiempo más podría balancear nuevo armamento estelar de acero en mi mano derecha.

Estábamos en el laboratorio donde mis padres trabajaban. Esta era una de las habitaciones donde probaban nuevo armamento estelar.

«Podríamos continuar, pero recuerda, tenemos una fiesta a la que asistir. Towa se podría enojar si te muestras luciendo como un fideo aguado.»

«Hmm… bien, vamos a parar aquí.»

«Sí.»

«…Hey, Papá.»

«¿Qué?»

Yo había levantado mi cuerpo acabado y observaba mi espada. «¿Seré realmente capaz de convertirme en un mago estelar como tú?»

«…Seguro. Apuesto a que serás capaz de superarme.»

«¿De verdad?»

«Yo no te mentiría. Estoy seguro de eso,» dio papá con una sonrisa. «Eso no pasara por un tiempo todavía, sin embargo.» Y con eso, se levantó y dejó la habitación. Él había hecho tanto ejercicio como yo, aun así, no lucia cansado para nada.

«¡Hey, espera!» Grité, mientras perseguía su larga sombra.

*

«Eso debería bastar. Ahora por el pastel.»

«…¿Puedo comer una pieza?» Extendí mi mano hacia una gran pieza se pollo frito que estaba alineada con el resto de la comida.

«Solo aguanta un poco más. Voy a llamar a Towa y a tu madre.»

«Iré contigo.»

«Ellas deberían estar cerca…» dijo, mientras atravesábamos el laboratorio juntos.

Nadie más estaba dentro. Mis padres estaban a cargo de este bloque y usualmente trabajaban aquí con sus subordinados, pero dado que era feriado, nosotros éramos los únicos presentes.

«…Esto es raro.» Papá repentinamente se detuvo.

«¿Qué pasa?»

«Kokuya, espera aquí un minuto.»

«…¿Huh? ¿Por qué? ¿Qué está sucediendo?»

«¡Solo espera aquí! ¡Regresaré enseguida!» dijo, mientras corría pasillo abajo. Él corrió tan rápido, no había forma en la que fuera capaz de alcanzarlo. ¿Qué lo haría asustarse tan de repente? Permanecí allí solo un rato más, lleno de impotencia y miedo.

Towa y Mamá se suponía estaban en la habitación donde habían obtenido la medida de mi poder estelar antes. Imaginé que debía ser allí donde Papá había ido, así que decidí seguirlo – pero antes de eso, me voltee y regresé para coger mi nueva espada de acero. Estaba comenzando a tener un mal presentimiento, así que quería mi arma solo por si acaso.

Cogí mi espada y corrí… y corrí… entonces, la vi.

Mi madre yacía en el suelo, cubierta de sangre. En la habitación estaban dos hombres que nunca había visto antes. Ambos tenían espadas, una de los cuales estaba cubierta en sangre roja – la sangre de mi madre.

Papá estaba empuñando su espada contra los dos hombres, pero ya estaba cubierto de heridas. Towa estaba acurrucada de miedo en el suelo detrás de él. La habitación estaba en tinieblas, y la única fuente de luz era la de la luna que se deslizaba desde el cielo.

Fue todo tan repentino, ni siquiera podía procesarlo. Todo lo que sabía era que los hombres con quien Papá peleaba eran malos, y que necesitaba protegerlo a él y a Towa.

De repente, me lancé hacia uno de los hombres con mi espada en alto.

«¡Retrocede, idiota!» gritó papá.

El otro hombre se paró delante del que me estaba dirigiendo y balanceó su espada, lo cual fue suficiente para mandarme a volar al otro lado de la habitación. Mi espalda golpeó contra algo duro, y solté un quejido de dolor. Simultáneamente, escuche un hueco ‘clink’ mientras mi espada caía al suelo.

…Pero eso no fue lo único que golpeó el suelo. Cerca de mi espada, vi un brazo derecho cortado. Ese brazo… al momento que me di cuenta de que era mío, un intenso dolo envolvió mi hombro derecho. Luego, después que pude gritar, algo incluso más impactante pasó.

Una espada atravesó a mi padre.

No podía entender que estaba pasando en frente de mí. Solo… ¿qué es esto?

El hombre sacó su espada fuera del cuerpo de mi Papá. Ahí hubo una salpicadura de sangre fresca, seguida por un imposiblemente amplio rio de sangre. Papá cayó en una piscina de sangre, justo al lado de mamá.

Luego, el hombre giró sus ojos hacia Towa. Sin tener un segundo para pensar, recogí mi espada con mi brazo izquierdo e intenté correr frente a él. Pero pronto perdí mi balance y caí de nuevo al suelo con un patético ruido sordo.

«H-Hermano…» la voz temblorosa de Towa se arrastró detrás de mí.

«Está bien. Está bien…» Dije, sin ninguna convicción en mi voz.

Towa tocó mi brazo izquierdo – y repentinamente, sentí un inmenso poder detrás mío.

¿Huh? ¿Qué está pasando? Podía sentir una cantidad de poder estelar mayor que la que Papá había desplegado alguna vez enfrente mío. Miré alrededor y no vi a nadie más que a Towa – y un brazo protésico plateado que se había materializado en lugar del que había perdido.

Observé mi nuevo brazo derecho e intenté mover mi mano. Funciona. Cuando apreté mi mano derecha en un puño, pude sentir un increíble poder corriendo a través de mí.

Lo haré. Puedo matarlos con esto. Al momento que ese pensamiento se me ocurrió, escuché el eco de una voz en mi cabeza.

Asesina.

Fue volviéndose ruidosa, hasta que no podía pensar en nada más. Miré al hombre que acababa de matar a mi padre. Tengo dos enemigos. ¿El hombre que mató a Papá también mató a Mamá? Tal vez, eso no importa. Voy a matarlos a ambos a pesar de todo. Pero voy a empezar con el que mato a Papá, dado que él está en frente de mí.

La sed de sangre consumió todo.

 

Un comentario en “Kimi kara Uketsugu Brave Chronicle – Interludio (1)

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.