Era el primer día del festival escolar.Esa noche, la presidenta del cuerpo estudiantil de la Academia Midgard, Mononobe Mitsuki, había terminado de ayudar con los preparativos para el café de su clase para el día siguiente, y estaba patrullando la escuela con una linterna en la mano.
Mientras hacía las rondas a través de las diferentes aulas, prestando especial atención a si las fuentes de peligro de incendios habían sido apagadas, notó susurros tranquilos.
«¿…?»
Las voces venían de las escaleras que conducían al techo.
Mitsuki caminó sigilosamente y se dirigió hacia esa dirección.
«Jejeje … No eres una persona honrada.»
«De ninguna manera, no puedo compararme contigo.»
Oyendo una conversación abiertamente sospechosa, Mitsuki frunció el ceño.
«Aunque no sé quiénes son, debo detenerlos si esto es un comportamiento que quebranta la moral pública.»
Comprometiendo su determinación, Mitsuki entró en la escena del crimen.
«¿Qué están haciendo exactamente ustedes dos?»
Iluminó¿ con su linterna, Mitsuki preguntó bruscamente.
En medio del haz circular de luz, dos chicas fueron iluminadas.
Una de ellas llevaba gafas de sol con una máscara quirúrgica para ocultar su rostro.La otra chica tenía su rostro apartado del brillo de la luz.
«¡Eeek! ¡Presidenta Mitsuki! ¡Lo siento, lo siento!»
La chica de gafas de sol gritó, tiró el objeto en su mano, dio media vuelta y trató de huir.
«¡Hey! ¡Quédate allí!»
Mitsuki estaba a punto de perseguirla por las escaleras cuando la chica restante agarró su brazo.
«¡Date prisa y corre, la sostendré aquí!»
«¡Gracias!»
Mientras Mitsuki era obstruida, la chica de gafas de sol huyó de la escena.
«Fiu… Ella finalmente se escapó.»
La chica que había quedado respiró un suspiro de alivio, pero esta vez, fue el turno de Mitsuki de agarrarle el brazo.
«No te permitiré escapar, confiesa obedientemente, ¿qué era exactamente lo que estaban haciendo aquí? —¿Eh? ¿Directora?»
Mitsuki iluminó con la linterna el rostro de la chica y se congeló de la sorpresa.
Allí estaba la administradora principal de Midgard, la directora Charlotte B. Lord.
Ella se rascaba la mejilla con vergüenza, buscando una excusa.
«No, umm … No estaba haciendo nada ilícito, ¿okay? Como la directora, simplemente deseo formar lazos más fuertes con las estudiantes …»
«…… Elegir este tipo de lugar fuera de escrutinio, creo humildemente que sería bastante poco convincente si uno insistiera en que nada ilícito estaba pasando.»
Desde que estaba tratando con la directora, Mitsuki no podía tomar una postura demasiado contundente, pero aún así, ella preguntó en un tono agudo de voz.
En ese momento, su mirada se desplazó hacia los objetos esparcidos por el suelo.
«Esas son… ¿fotos? Qué tan raro es hoy en día ver a alguien imprimiendo esta gran cantidad de fotos para llevarlas.»
«Bueno, porque la censura de los datos digitales es muy estricta hoy en día, la impresión de ellos hace que sea más fácil mantener las cosas en secreto cuando se realizan transacciones—¡M-Mierda!»
La directora estaba explicando con presunción cuando se dio cuenta de su desliz de lengua.Cuando se cubrió la boca en pánico, ya era demasiado tarde.
«Transacciones…»
Una a una, Mitsuki recogió las fotos que estaban esparcidas por el suelo para comprobar el contenido.
«Estas son las fotos de las estuidantes tomadas durante el festival escolar, ¿no? Los ángulos son especialmente vulgares … ¿Obtuviste consentimiento al tomar estas fotos?»
«No, bueno …»
La directora miró hacia otro lado en pánico.
«Tendré que confiscar estas fotos si las tomaron sin consentimiento, incluso si usted es la directora, no puedo perdonar comportamientos que amenacen la moral pública.»
«E-Espera! En lugar de hacer una colección de jóvenes doncellas disfrazadas para el festival escolar, estos son registros importantes…»
«Directora, usted está confesándolo por su cuenta.»
Mitsuki suspiró con una exasperación indisimulada.
«Por favor, al menos… su foto, aunque sea esa, ¿podrías devolvérmela?»
Mitsuki estaba a punto de colocar las fotos en su bolsillo cuando la directora la agarró del brazo y suplicó.
«¿Su?»
«Tu hermano.»
«¿Nii-san? Pero los sujetos de las fotos son todas chicas …»
Mitsuki de repente se detuvo en mitad de la frase.Ella miró fijamente una foto particular pero la directora rápidamente la arrebató lejos desde el lado.
«¿Cómo está? Gran foto, ¿verdad? Inesperadamente mi tipo, no puedo dejar de sentir mi corazón acelerarse. Oh, cómo me arrepiento de no haber podido verlo en persona porque tenía demasiados asuntos que atender.»
«De hecho … Aunque el ángulo es todavía objetable, es una foto bastante bonita.»
Admirando la apariencia de su hermano que había sido forzado a travestirse para el primer día del festival escolar, Mitsuki respondió.
«¡Entonces!»
«Sin embargo, todavía tengo que confiscarla. La fotografía secreta es incorrecta.»
«Ahhh … Eso es tan cruel.»
La directora se desplomó en desesperación.
Viéndola así, Mitsuki se sintió un poco culpable.Entonces, ella dijo vacilante:
«Por favor, no esté tan deprimida, le devolveré la foto una vez que le explique a Nii-san y obtenga su consentimiento.»
«¿En serio? Bueno, pero … no creo que lo consienta.»
«No se preocupe, déjemelo a mí, me aseguraré de que lo consienta.
Mitsuki prometió a la directora con una sonrisa, terminando su frase en su mente—
—Porque quiero una también.
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