Capítulo 68 – Café Puniqueen
Después de tener un manju cada una, el grupo se embarcó para encontrar un lugar para comer.
Sheryl usó su supremo poder social para pedir recomendaciones a los transeúntes.
«¡Aparentemente hay un lugar llamado Café Puniqueen que es tanto engañoso como delicioso! ¡Está justo en la siguiente calle!»
«Sheryl… Estoy impresionada de tus habilidades sociales……..»
«¿Eh? Es sencillo. Todo el mundo puede hacer esto, excepto tú, Iris-sama.»
Ella respondió con una cara seria.
Este agudo comentario hizo caer los hombros de Iris.
Aunque era completamente cierto, no se sentía muy bien por eso.
«Deberías apurarte y arreglar tu sociofobia.»
«Hablar es divertido, ¿por qué es tan difícil para ti~?»
Llegaron otros dos impactos de Muriel y Eclipse.
La vida es sufrimiento.
Sin embargo, una nave de rescate apareció de una dirección inesperada.
«Oh, yo podría ser apenas valiente como para capturar a algunos completos extraños y preguntar por un buen restaurante……»
Marion habló mientras estaba sumida en sus pensamientos y Jessica asintió estando de acuerdo.
«A pesar de que estaría bien hablar casualmente, es difícil preguntarle a extraños de la nada.»
«¿Es así?»
Sheryl inclinó su cabeza desconcertada.
«Es sencillo y simple. No hay nada sobre que dudar.»
«¿Marion y Jessica son secretamente asociales~?»
Muriel y Eclipse dijeron mientras asumían sonrisas de empatía.
No trataron de pinchar en la llaga, sino que honestamente pensaban eso.
Los personajes despreocupados deben ser temidos, Iris temblaba de miedo.
«Comparadas con ustedes tres, podríamos ser algo asociales.»
«¡Mamá, no las uses como punto de referencia! ¡Estoy absolutamente segura de que somos las normales!»
Marion respondió con fuerza.
Normal.
Si esas dos eran normales, eso significaba que Iris era normal.
«¡Camaradas! ¡Alianza de Normies!»
Iris se interpuso entre Marion y Jessica mientras hacía una declaración.
«Punipuni.»
«¿Q-que pasa? ¡Estoy en el lado normal! ¡¿Estás insinuando que puedes preguntarle fácilmente a extraños?!»
«¡Puninin!»
«Ah………. Lo olvidé, nadie entiende lo que dices de todos modos … ¡Bienvenido a la Alianza de Normies!»
«Para el carro. Tiene sentido que Punigami pertenezca a la Alianza de Normies. Pero tú no eres el caso. Harás awawa antes de que puedas preguntar por un restaurante.»
Marion soltó una aguda réplica.
«¡Pero incluso Punigami solo puede decir ‘punipuni’!»
«¡Eso está más allá de su control!»
«¡¿POR QUÉ?!»
«Por qué… ¡porque es un slime, por eso!»
«¡Esto está más allá de mi control también! ¡Soy una encerrada! ¡Eso es normal! ¡Alianza de Normies!»
«…… ¿Mm? ¿Aunque lo es……?»
Marion pensó con sus manos entrelazadas.
Iris se llevó el premio.
¡Victoria impecable mediante un impulso abrumador!
A partir de ahora, Iris era normal.
O eso creía ella …
«De una forma u otra, tu disposición encerrada es un hecho. No es algo para estar orgullosa.»
Marion resumió brevemente la conversación.
La discusión golpeó directamente en el corazón de Iris.
«¡Guwa!»
Como fue súper efectivo, Iris inmediatamente se derrumbó sobre Punigami.
«Puni.»
«Eres una molestia.» se quejó Punigami.
Sin embargo, Iris no tenía la voluntad de caminar, así que se quedó en el lugar.
«Punini.»
No se puede evitar, murmuró y optó por no preocuparse.
Punigami era siempre el más confiable.
«¡Aquí está! ¡Aquí está! ¡Café Puniqueen!»
Sheryl gritó mientras señalaba el letrero.
Tenía un escaparate espacioso, con unos cincuenta clientes ya dentro.
Había una cola sustancial fuera del lugar.
Tal vez era un lugar genial.
«Al escuchar su nombre me imaginé algo más humilde… que impresionante establecimiento.»
Sheryl asintió profundamente impresionada.
«Hay un slime negro dibujado en el letrero. Parece fuerte.»
«Pero Punigami es mucho más adorable. ¿Qué es Puniqueen por cierto?»
«Ahora que lo pienso, ¿ese hombre no dijo que iba a derrotar a Puniqueen? …….. ¡Creo que podemos saber más una vez dentro!»
Sheryl apretó su puño con emoción.
«¿Mm? ¿No vas a preguntar por pistas? Cualquier empleado debería saber una cosa o dos.»
Iris preguntó casualmente.
«No-no-no. ¡Ingenua, Iris-sama! Probablemente dirán algo como: ‘Este es un café, no una tienda de información, señorita.’ Así que ordenemos mucho y comamos mucho. ¡Eso debería aflojar sus lenguas!»
«Fufu. ¿Quizás leíste demasiadas novelas recientemente, Sheryl-chan?»
«¡Glup!»
Mientras pasaron el tiempo en conversaciones tontas, finalmente llegó su turno.
«Una mesa para seis y un slime. ¿Correcto?»
«Punin.»
«Entonces síganme a sus asientos.»
«Punipuni.»
Como se esperaba de la Tierra Santa para domadores de slimes.
De alguna manera se estableció una conversación entre él y la empleada.
«¡Puni!»
Al llegar, Punigami se subió a la silla más al fondo.
Iris se sentó a su lado y Marion al lado de ella.
«Veamos el menú.»
«Todo suena sabroso. Quiero todo.»
«Eso es un poco muy codicioso. De todas formas no podrás comer todo.»
«Que desafortunado. Pero comeré tanto como pueda~»
«¡Igual Esta Señora!»
Muriel y Eclipse miraron ansiosamente el menú mientras dejaban salir un «pizza» o «hamburguesa» ocasionalmente.
«¿Qué quieres, Punigami?»
«Punipuni.»
«¿Eh? ¿Un menú separado para slimes? Ah, ya veo, Slislan nunca deja de impresionarme.»
Había una sección exclusiva para slimes en el menú.
Aparentemente, fue desarrollado por un mejor criador con una temperatura óptima y un valor nutricional en mente.
«Emm, set de jengibre tostado para slime, tortilla para slime, estofado para slime. ¿Udon para slime? Las formas de la aldea de Wagaka se extendieron por todas partes……..»
«¡Puni!»
«¿Quieres el udon de slime? Entonces pediré el udon para humanos.»
Todas ordenaron lo que quisieron. Todo lo que quedaba era esperar a que estén listos.
Mirando alrededor de la tienda, vieron a muchos clientes con sus slimes.
Algunos de ellos abrazaron sus slimes delante de ellas.
Iris intentó imitarlos poniéndolo en su regazo y jugando.
«¿Puni?»
«¿Para qué es eso?»
«Ya sabes, demasiado tiempo libre.»
«Seguro. No me importaría unirme.»
«Punini.»
Tocado por ambas, Punigami dejó escapar una voz de placer.
«Parecen estar divirtiéndose. ¡Esta Señora se unirá a las caricias!»
«Yo también~»
«¡No me importaría hacerlo!»
Muriel, Eclipse y Sheryl, que estaban al otro lado de la mesa, se inclinaron y estiraron sus manos en dirección a Punigami.
«¡Pu-Puni!»
Aparentemente, cinco personas eran demasiado para que él las manejara, así que comenzó a quejarse.
Jessica con un «Arara, ufufu» observó sus travesuras desde el costado.
¿La comida todavía no está lista? Continuaron las caricias mientras pensaban eso.
En un ambiente tan pacífico, hubo un repentino arrebato de ira.
«¡La suavidad de mi slime no tiene comparación!»
«¡No, mi slime es definitivamente más suave!»
Mirando de cerca, vieron a dos hombres enojados mirándose y discutiendo.
La discusión se intensificó un paso más cuando se agarraron de la ropa del otro.
«¡Quieres hacerlo, ¿eh?!»
«¡Sí, prepárate para ello!»
Un paso y sería una pelea.
Todo el café se agitó.
«Justo cuando todos la estaban pasando bien. Esos tipos no tienen modales.»
«Se ven un poco borrachos.»
«Las peleas no son buenas. Tengo que detenerla~»
Una pelea repentina sería realmente mala. Para el apetito.
Sin embargo, Iris no estaba equipada con la capacidad de comunicación lo suficientemente grande como para intervenir.
Sheryl era la mejor en ese aspecto, pero le faltaba el departamento de fuerza.
Muriel y Eclipse no eran lo suficientemente intimidantes.
Jessica era algo despreocupada. Ella torcería sus brazos con una sonrisa inofensiva en su cara. Lo cual era bastante aterrador.
Eso dejaba…..
«Marion. Buena suerte.»
«¿¡Yo!? Quizá pueda hacerlo…..»
Tal vez porque llegó a la misma conclusión, Marion estaba a punto de levantarse a regañadientes de su asiento.
Sin embargo, antes de eso sucediera.
Un slime negro saltó de la cocina y se estrelló contra los dos.
«¡Guwa!»
«¡¿Qué?!»
Dramáticamente las caras de ambos chocaron contra la mesa.
Sus caras fueron cubiertas de sopa, que parecían bastante calientes.
Sin embargo, el slime negro tomó toda la atención de Iris y su destino no se registró en su mente.
La razón era que el slime negro se veía exactamente igual al del letrero.
«Hmm. Seguro que tienen agallas para ser ruidosos en el Café Puniqueen. Olvídense del pago y lárguense. La gente como ustedes no son clientes.»
Una chica rubia apareció de la cocina al siguiente segundo.
Ella estaba en su adolescencia casi igual que Cindy.
«¡E-Eres la campeona!»
«¡¿Crees que puedes ir por ahí golpeando a los clientes?!»
«Como he dicho, no son clientes. Los echaré a la fuerza. Hazlo, Puniqueen.»
«¡Puin!»
Los «ojos» del slime brillaron de rojo intimidando enormemente a los hombres.
«Chi… ¡incluso Puniqueen no prevalecerá dos contra uno! ¡Vamos, Slikichi!»
«¡Derrota a Puniqueen, Slilis! ¡Seremos los nuevos campeones!»
Sus slimes se abalanzaron sobre el slime negro.
Dos contra uno era de cobardes.
«¡Puni!»
Mientras Iris estaba en silencio, Punigami se apresuró en ayudar al slime negro.
Sin embargo, la preocupación fue innecesaria.
El slime negro fácilmente los envió a volar.
Los dos volaron directamente a la cara de sus compañeros, lo que resultó en que salieran del café.
«Este slime negro es increíble … ¡tal vez incluso más fuerte que Marion!»
«¡No, eso es una exageración muy grande! Sin embargo… esa velocidad y potencia están más allá de cualquier slime que haya visto.»
Mientras Iris y el resto estaban ocupadas admirando la fuerza del slime, los vítores aumentaron entre la audiencia.
«¡Como se esperaba de Puniqueen, la campeona por tres años consecutivos!»
«¡Gana esta vez también, campeona! ¡Soy tu fan!»
«¡Puniqueen! ¡Tus vides oscuras son las mejores!»
Al parecer, la chica rubia y el slime negro eran celebridades para esas personas.
Según ellos, eran la pareja campeona del sumo de slimes.
Por tres años consecutivos.
«Pu-Puni.»
A pesar de apresurarse a ayudar, Punigami ni siquiera tuvo oportunidad y se sintió muy deprimido.
«……¿Qué? ¿Quieres intentarlo también?»
La chica rubia que llamaron campeona fulminó con la mirada a Punigami.
«¡Pu-Puniiii!»
Punigami negó desesperadamente la acusación.
«……De acuerdo. Bien por ti.»
Diciendo eso, la chica volvió a la cocina.
«Puin, puin.»
El slime negro siguió después.
El público los despidió con gran ovación.
«¡Campeona! ¡Campeona! ¡Campeona!»
«¡Puniqueen! ¡Puniqueen! ¡Puniqueen!»
Ella era muy popular.
Cindy no se equivocó cuando dijo que los slimes poderosos se ganaban el respeto de todos.
Sin embargo, Iris escuchó algo que esta campeona murmuró para sí misma.
«…..Ridículo.»
Ella habló para sí misma.
No pretendió ser escuchada,
Sin embargo, el oído trascendental de Iris logró captarlo.
¿Por qué suena tan distante en medio de los constantes elogios?
Tal vez era igual a Iris y odiaba llamar la atención sobre sí misma.
Sin embargo, ese no parecía ser el caso.
Quizás Cindy sepa una o dos cosas.
Preguntémosle la próxima vez que nos encontremos.
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