Maou no Musume wa Sekai Saikyou dakedo Hiki-NEET! (WN) – Capítulo 56

Capítulo 56 – Piedra mágica radiante

«Sal de ahí, sal de ahí.»

Igual que antes, Muriel golpeó la puerta.

Hubo gritos de los ciudadanos viniendo detrás de ellas, pero Iris y el resto no les prestaron ninguna atención.

Pido disculpas por asustarlos pero es algo inofensivo, así que aguántenlo.

«Que ruidosas. ¡No tengo nada que decirles!»

La voz del vizconde vino desde el interior de la mansión.

Su voz era fuerte, pero había más miedo que ira.

Debe haber algo dentro de la mansión que no quiere que nadie vea.

«No digas eso y sal ya. Haz eso y Esta Señora se detendrá. De lo contrario, Esta Señora golpeará sin parar.»

Esto resultó convincente y el vizconde mostró su rostro cuando abrió la puerta ligeramente.

En el siguiente momento, sus ojos se abrieron de par en par en shock.

El vizconde no veía a Roshe y Muriel, o a Iris. Su mirada estaba fija detrás de ellas.

Había dos grandes dragones en su jardín.

«GYAOON.»

En el momento en que uno de ellos notó al vizconde, lanzó un grito a pleno pulmón.

El dragón en cuestión era Jessica.

Por supuesto, el otro era Marion.

Ambas eran dragones razonables, no atacarían a personas y edificios de la nada.

Sin embargo, el vizconde, siendo ignorante de esto, temblaba de horror.

«¡¿P-P-Por qué hay dragones aquí?! ¡Me van a comer!»

«A quién le importa eso. Déjanos investigar tu mansión.»

«¡Es al revés! ¡Roshe-sama! ¡Por favor proteja esta ciudad!»

El vizconde se arrodilló y oró a Roshe con sus manos juntas.

Sin embargo, la Deidad Guardiana negó con su cabeza.

«Imposible. No puedo hacer eso.»

«¡¿P-Por qué?! ¡¿Una Deidad Guardiana es más débil que un dragón?!»

«No, yo soy más fuerte. Ninguna deidad guardiana caería ante un dragón. En teoría, es así.»

«¿En teoría…..?»

«Ah, cierto. ¿Cuándo fue la última vez que visitaste mi iglesia? ¿No te acuerdas? Una Deidad Guardiana extrae su poder de la fe. Sin embargo, te olvidaste de orar a pesar de ser un lord. Te bastó que llegara un dragón para que comiences a orar de nuevo. Contigo como su líder, los ciudadanos perdieron su fe en mí. Por eso no puedo ganar contra un dragón.»

Al escuchar las palabras de Roshe, el rostro del vizconde alternaba entre azul y púrpura.

Sin embargo, Roshe estaba mintiendo.

El pastel de manzana que comieron en la iglesia era realmente delicioso.

Ella tenía creyentes que hacían deliciosos pasteles de manzana para ella. No había forma de que hayan perdido su fe en ella.

Pero el vizconde no tenía forma de saberlo.

Como el lord, carecía de la comprensión de su propia gente.

«¡¿E-Entonces qué va a pasar con esta ciudad?!»

«Todos serán comidos o incinerados, supongo.»

Roshe proclamó fríamente.

«¡No puede ser, se lo ruego! ¡Es la tierra de mis antepasados! ¡Voy a rezar diariamente de ahora en adelante! ¡Haré lo que sea! ¡Por favor ahuyente a los dragones!»

Haré lo que sea–eso es lo que ella más quería escuchar.

«Si somos yo y mi hermana mayor Iris, podemos hacer eso~. ¿Realmente harás lo que sea~?»

Eclipse dijo la línea ensayada.

La razón por la que Iris eligió a Eclipse para esto fue que estaba demasiado nerviosa para decirlo ella misma.

«¡S-Si es algo que puedo hacer!»

«Entonces déjanos entrar~»

«Además, si encontramos lo que buscamos, nos contarás todo.»

«¡¿J-Justo ahora?! ¡¿Qué pasa con los dragones…?!»

«Suelta la lengua. Si no te das prisa, la ciudad estará acabada.»

El momento en que Muriel amenazó así.

» «¡Gyaooon!» »

Los dragones rugieron.

Para Iris, este rugido parecía bastante apagado, pero para todos los demás, debe haber sido un rugido feroz.

«¡Gyaaa, voy a hablar! ¡Lo contaré todo! ¡T-Todo fue de acuerdo con el contrato entre mis antepasados ​​y Gashe-sama!»

El vizconde lo confesó todo fácilmente.

Fue tan fácil, que Iris lo encontró decepcionante.

Sin embargo, ante un dragón en su jardín, el vizconde estaba desesperado.

Intercambiar un secreto de sus antepasados ​​por los suyos parecía un buen trato.

«¿Contrato? Dime los términos. O te voy a comer. Gyaoon.»

«¡Hiyaa, sálvenme!»

No solo del dragón, sino que incluso fue asustado lo suficiente por Muriel ahora.

«¡Como mencionó la inquisidora, la ciudad estaba en problemas debido a las manzanas hace doscientos años! Mi antepasado le suplicó a Gashe-sama…… destruir la producción de manzanas de la Baronía Silverlight.»

«¡¿Qué?!»

Sheryl, la actual Baronesa Silverlight, gritó con sus ojos muy abiertos.

«¡Lo siento! ¡Lo hicieron mis antepasados! ¡Soy inocente!»

«Relájate, Sheryl. Escuchémoslo primero.»

«Muu …… Si Iris-sama lo dice……»

Sheryl aceptó a regañadientes.

Tuvo dificultades para mantener la calma sabiendo la razón detrás de la caída de sus propios antepasados.

A pesar de que el criminal no era este vizconde sino su antecesor.

«Vamos, vizconde. Estoy muy interesada en este contrato entre ellos y mi padre.»

«S-Sí…… Gashe-sama dijo ‘Si sellamos el poder de Muriel, el problema se resolverá solo’. Sin embargo, sellar el poder de otro dios es difícil incluso para otro dios. Es por eso que Gashe-sama encargó a mis antepasados ​​la recolección de piedras mágicas radiantes. Como un tributo para sellar el poder de Muriel-sama.»

«¡¿Piedras mágicas radiantes?! Ah, ya veo. Entonces es por eso que padre de repente se volvió mucho más fuerte…»

Dijo Roshe decaída.

«¿Qué es una piedra mágica?»

Eclipse preguntó, Iris tampoco lo sabía.

Pero considerando que Gashe les dijo explícitamente que las recolectaran, no parecían ser piedras ordinarias.

Sonaba bastante poderosa yendo por su nombre.

«La piedra mágica radiante es una piedra que emite poder mágico naturalmente. Si combinas tu propio poder mágico con el de una piedra mágica radiante, podrás lanzar poderosos hechizos. Sin embargo, es bastante rara y valiosa, ni siquiera muchos conocen su nombre.»

«Mmm…… Muriel está muy bien informada.»

«Fufu. ¡Esta Señora no ha estado viva durante trescientos años por nada!»

Siendo elogiada por Iris, Muriel se jactó sin reservas inflando su humilde pecho.

«Los antepasados gastaron grandes sumas de dinero para recolectar piedras mágicas radiantes por todo el mundo. Después de tomar posesión de las piedras mágicas radiantes, Gashe-sama amplificó su propio poder… y selló el de Muriel-sama. Gracias a eso, la Baronía Silverlight cerró su negocio y las ventas de manzanas del Vizcondado Cunningham alcanzaron sus valores anteriores. Los fondos gastados por comprar piedras mágicas radiantes se recuperaron en un corto período de tiempo.»

«… Y así, padre se convirtió en un dios fuerte gracias al dopaje de las piedras mágicas radiante y ascendió al cielo. Después de dejarme la ciudad a mí.»

«Sí…… tal es la historia que se transmite en nuestra familia.»

El vizconde se sentó en el suelo y asintió con indiferencia.

Una Deidad Guardiana sellando el poder de otra Deidad Guardiana.

Ya sean humanos, dioses o demonios, tienen todo tipo de personalidades, pensó Iris

«Entonces, ¿qué hay del poder mágico que viene de esta mansión?»

«Sobre eso… hace doscientos años, Gashe-sama le pasó a mis antepasados ​​una cierta olla. Esta olla permite que el poder mágico de Gashe-sama alimente el sello desde el Cielo.»

«Así que ese es el truco detrás de esto… Esta Señora romperá esa olla. ¿Tienes algún problema con eso?»

«Entiendo… pero por favor, ¡haz algo con esos dragones primero!»

El vizconde miró a los dragones antes de temblar.

Sin tener en cuenta al vizconde, ellas no podían seguir asuntando a la gente de la ciudad.

Ya que él confesó todo, Iris y el resto cumplieron con el trato y ahuyentaron a los dragones.

«Vuelen fuera de la ciudad, ustedes dos. Espérennos cerca de las puertas. En forma humana, para no asustar a los porteros.»

» «Gyaoon.» »

Los dragones asintieron y se fueron volando.