Maou no Musume wa Sekai Saikyou dakedo Hiki-NEET! (WN) – Capítulo 35

Capítulo 35 – ¡Piedra, papel o tijeras!

«Aja, así que te has materializado gracias al poder mágico de Iris. Y estás discutiendo sobre quién es la mejor Deidad Guardiana.»

«En efecto. Me alegra que seas tan perceptiva.»

Muriel asintió con satisfacción.

Luego Marion puso su mano en su barbilla mientras exprimía un poco su cerebro.

Pronto, ella abrió su boca para atraer la atención de todos a un punto fundamental.

«Antes de decidir quién es la mejor… ¿no es Muriel incapaz de materializarse sin la presencia de Iris? ¿No hace esto inútil todo el argumento?»

«¡Guha!»

Algo blanco salió de la boca de Muriel.

En el siguiente momento, ella se derrumbó sin energía sobre Punigami.

«¡E-Esto es malo! ¡Ella no respira! ¡Además, gradualmente se vuelve transparente!»

Sheryl levantó un grito nervioso.

«¿¡H-Habrá que regresar esa cosa!?»

Iris agarró la cosa blanca y con fuerza la metió en la boca de Muriel.

Su respiración volvió e inmediatamente revivió.

Aparentemente, esa cosa blanca era el poder mágico de Iris que compartió hace un tiempo.

«He presenciado un jardín de flores allí por un momento…..»

«Emm……. ¿fue mi culpa…?»

Preguntó Marion con cautela.

«No fue realmente tu culpa… Muriel parece estar física y mentalmente débil, por favor ten cuidado en el futuro.»

«¿¡Qué clase de animal es ella…!?»

«¡Descarta tus miedos! Esta Señora no morirá tan fácilmente. ¡Justo ahora ese fue un débil intento de enfrentar la realidad, nada más!»

«No, acéptalo apropiadamente. ¿Es así como una Deidad Guardiana debe comportarse?»

«¡Guha!»

«¡E-Esto es malo!»

Esta vez fue Marion quien empujó la cosa blanca por su garganta.

«He visto el jardín una vez más.»

«Por favor, pospón tu partida al jardín de flores……… obstruye el flujo de la conversación.»

«Me disculpo. Intentaré contenerme la próxima vez.»

Muriel asintió llena de confianza.

Irradiar tanta confianza después de todo lo que sucedió requería cierta fortaleza mental.

La verdadera Deidad Guardiana es realmente impresionante, pensó Iris para sí misma.

«Bien entonces, Muriel. ¿Está bien contarme como ganadora?»

«No, espera. Esta Señora puede ser incapaz de materializarse sin tu poder mágico … ¡pero un duelo es diferente! ¡Comparemos nuestras contribuciones a la aldea!»

«Incluso si dices eso… ¿Cómo se mide la contribución?»

«Preguntemos a los aldeanos a quién ven como una mejor Deidad Guardiana.»

«Haa….. entonces intentemos preguntarle a la Lord, Sheryl, primero.»

«¿Yo? Veamos… primero lo primero, Iris-sama es increíble. ¡Ella volvió verde este desierto, revivió el río subterráneo e incluso hizo un lago! Gracias a eso tuvimos una gran cosecha de papas este año! ¡Por encima de todo, ella es más linda que cualquier otra cosa!»

Dijo Sheryl con orgullo como si todo lo hubiera hecho ella misma.

Iris, que escuchaba a un lado, se sonrojó ligeramente.

«¿Qué opinas de Esta Señora?»

«Eh, ¿sobre Muriel-sama ……? Bueno, ya sabes…..»

«¡Debería haber algo! ¡He trabajado increíblemente duro, ¿sabes?!»

«Mis disculpas…… Mi familia Silverlight se rindió con esta tierra hace casi doscientos años……. Como no quedan grabaciones de esos tiempos, no sé absolutamente nada acerca de Muriel-sama.»

«Horrible……. Entonces, ¿qué opinas de la actual Señora?»

«La actual Muriel-sama… emm, es débil en las Vencidas, se desmaya por cada pequeña cosa, y tiene una desbordante confianza en sí misma a pesar de los puntos anteriores…………»

«¡Calumnias!»

Muriel agitó furiosamente sus manos.

«Emm, espera un poco. Intentaré encontrar algo positivo………ah, ¡sí! ¡Eres increíblemente hermosa! ¡Desde esta perspectiva, absolutamente puedes competir con Iris-sama!»

«¡Ya veo! ¡Esta Señora es de hecho una belleza! ¿¡Qué más!?»

«Más…… emm, mis poderes son inadecuados para encontrar otra cosa…….»

Sheryl murmuró impotente.

«Imposible…… entonces escuchemos los puntos positivos de Esta Señora desde la perspectiva de un dragón. Diferentes especies definitivamente descubrirán algo.»

«¿Eh? No me hagas preguntas tan difíciles por favor.»

«¡Guha!»

Al escuchar la despiadada respuesta de Marion, ella estuvo a punto de escupir la cosa blanca de nuevo.

En el último momento, se tapó la boca con las manos tragándola con fuerza.

«Fuu …… apenas evité un golpe letal.»

«Punini.»

«¿Quizás deberías rendirte ya?», dijo Punigami, quien se convirtió en la silla de Muriel desde hace un tiempo.

Desafortunadamente, solo Iris podía entender sus palabras, así que Muriel permaneció ignorante.

«Entonces, ¿qué tal un demonio, Eclipse…? Elogia a Esta Señora un poco, por favor…….»

El objetivo original de comparar los méritos desapareció en el aire siendo reemplazado por el deseo de aliviar sus propias heridas mentales.

«Veamos. No me aburro viendo a Muriel. Es divertido. Quédate aquí para siempre.»

Como se esperaba de Eclipse.

Ella elogió a Muriel con una sonrisa.

Ella transmitió sus verdaderos sentimientos sin recurrir a la adulación.

Aunque no tenía relación, a Iris le costó mucho olvidar esa sonrisa suya.

«Ooh… Eclipse es una buena niña… en otras palabras, ¿es la victoria de Esta Señora?»

«Emm… ¿creo que la Hermana Mayor Iris sería una mejor Deidad Guardiana…?»

Sabiendo que no había rastro de insinceridad, Muriel recibió una abrumadora cantidad de daño.

«¡Guhaa!»

La cosa blanca aceleró a una velocidad no antes vista mientras atravesó los vitrales y voló hacia el cielo.

Iris hizo crecer alas negras, se elevó al cielo, agarró la cosa en pleno vuelo, regresó a la iglesia y la metió de nuevo en la boca de Muriel.

«El jardín de flores más gigantesco que he visto en mi vida…….»

«Sería mejor no presionarte a ti misma. Digamos que has ganado, entonces devuélveme a Punigami.»

Sintiéndose cansada, Iris decidió entregarle la victoria a Muriel.

Por supuesto, ella no planeaba renunciar a Punigami, solo en este punto Iris no cedería.

«Esta Señora lo entiende. Ten a Punigami de vuelta.»

Muriel dijo con voz satisfecha mientras se bajaba de Punigami.

«Puni.»

Punigami se acercó a Iris.

Ya que ese es el caso, bien podría sentarse.

«Aquí vamos.»

«Punipuni.»

«Tener a Iris encima me calma después de todo,» dijo Punigami amablemente.

Iris palmeó su superficie en agradecimiento.

«Bien entonces. Ya que este asunto está resuelto, ¡tengamos otro duelo!»

«¿Eh? Está bien si tú ganas.»

«No, Esta Señora no estará tranquila por una victoria dada. Esta es la última, Esta Señora lo promete.»

«Ya veo… bueno, si es la última, entonces está bien.»

«Bien. Hagámoslo juntas…… ¡piedra, papel o tijeras!»

Inesperadamente, se trataba de piedra, papel o tijeras.

Muriel sacó unas tijeras.

Iris vio a través de los movimientos de su cuerpo e hizo papel para perder a propósito.

«¡Oh, lo hice! ¡Esta Señora ha ganado! ¡Con esto, Esta Señora se convirtió en la indiscutible Deidad Guardiana número uno de esta tierra, con todos los presentes como testigos!»

«Wai, felicitaciones.»

Eclipse fue la única que felicitó a Muriel que se regocijaba.

El resto solo aplaudió silenciosamente.

¿Puedes realmente proclamarte la Deidad Guardiana número uno por ganar un juego de piedra, papel o tijeras?

¿Hay algún significado en convertirse en una de todos modos?

Solo Muriel sabía las respuestas.

No, tal vez ella tampoco.