Capítulo 3 – El Trabajo a Medio Tiempo Confidencial de la Princesa
Parte 1
Esto ocurrió en un cierto día un par de semanas antes del festival del Blade Dance.
Después de asistir a una clase de asignatura libre antes del mediodía, Claire y Kamito paseaban por un pasillo en la Academia cuando notaron a una chica de pie delante de un tablón de anuncios y se detuvieron.
«¿Hmm…? ¿No es Fianna?»
«Sí, me pregunto ¿qué está haciendo allí?»
Kamito y Claire intercambiaron miradas y silenciosamente se le acercaron por detrás.
«… Este no es bueno. No es este tampoco, hmm…»
La princesa imperial estaba pensando en algo mientras miraba el tablón de anuncios con una mirada seria en su rostro.
«¿Qué estás haciendo, Fianna?»
«¿¡Kyah!?»
Kamito le dio unas palmaditas en el hombro, lo que la hizo voltear hacia atrás frenéticamente, mirando con sus ojos color anochecer ensanchados.
«Kamito-kun… Ah, y Claire también.»
«¿Qué quieres decir con ‘y’…?»
Claire puso mala cara con rabia y miró el tablón de anuncios.
«¿Qué estás mirando con tanta seriedad?»
En el tablón de anuncios colgado en la pared en el pasillo, había varias «misiones», organizadas de acuerdo con el nivel de dificultad. Dado que la mayoría de estas eran misiones seguras y de baja clasificación encargadas por los residentes de la Ciudad Academia y los pueblos cercanos, casi no había misiones de alto rango de riesgo.
Aunque había algunas misiones de alta clasificación sobre derrotar espíritus superiores de clase archidemonio anunciados en la parte superior del tablón de anuncios, estas misiones parecía que estaban reservadas para las estudiantes de último año como Velsaria Eva en adelante.
«¿Me estás diciendo que estás aquí para aplicar para una misión?»
La ceja de Claire tembló.
«Quiero dejar esto claro en primer lugar. A menos que ganemos en el torneo, misiones de este nivel de dificultad no serán de mucha ayuda en la calificación de nuestro equipo para competir en el Blade Dance.»
«No, estoy mirando a ese lado…»
Fianna giró la cabeza hacia el lado y señaló a otra esquina del tablón de anuncios.
Publicados había avisos de reclutamiento para las estudiantes.
«… ¿Trabajos de medio tiempo?»
Esta vez, fue el turno de Kamito de sentirse perplejo.
«Fianna, ¿por qué tienes que…?»
Fianna era un verdadero miembro de la familia imperial. Basado en el estatus, no debería necesitar trabajar.
Además, en la Academia, donde las estudiantes eran todas jóvenes damas de noble cuna, era poco probable que las estudiantes tuvieran que trabajar a tiempo parcial, pero en realidad, el número de ofertas de trabajo a tiempo parcial no eran pocos en absoluto. Esto se debía a que había excepciones, como los nobles de menor rango que no poseen vastos territorios o estudiantes con circunstancias especiales como Claire.
«Eh, esto es…»
Fianna miró vacilante.
«P-Por dinero…»
Ella susurró, bastante avergonzada.
«Por dinero… Pero tú todavía cuentas como realeza.»
«Es sólo un título vacío. El salario de la casa imperial ya no está y ya he gastado todos los cristales espirituales que traje.»
En respuesta al auto desprecio de Fianna, Claire y Kamito no pudieron evitar caer en silencio.
Ella fue exiliada por la familia imperial al ser la Reina Perdida que había perdido el poder de su espíritu contratado. Sin ningún tipo de riqueza, su salario cortado, realmente había abandonado todo para venir a esta Academia.
…Todo en aras de encontrarse con Kamito.
«Pero casi ninguna de estas ofertas parece nada bueno…»
Volviendo la mirada hacia el tablón de anuncios, Fianna suspiró levemente.
«¿…? Solías ser una candidata a Reina en el Instituto del Ritual Divino, ¿verdad? ¿No debería ser fácil encontrar un puesto de trabajo si utilizas tus calificaciones de princesa doncella?»
Esto era evidente. Casi todos los avisos de reclutamiento aquí buscaban los poderes poseídos por las estudiantes de la Academia como elementalistas. Ejemplos incluyen trabajos de danza ritual para hacer ofrendas a los espíritus de la tierra en oración por cosechas abundantes, o trabajos pidiendo espíritus poderosos para talar los bosques. De hecho, como alguien entrenada en el Instituto del Ritual Divino, este tipo de puestos de trabajo debìa ser muy fácil para ella para cogerles el truco.
«Mira, hay un trabajo de construcción de presa que está contratando. Si ese espíritu caballero…»
«¡I-Inaceptable! Usar el espíritu de la familia imperial para trabajos de construcción.»
Fianna negó con la cabeza. Entonces ella miró hacia abajo ligeramente.
«Por otra parte, en esta ocasión, no quiero usar mucho mis poderes como una princesa doncella.»
«¿…? Por qué…»
«Debes ser capaz de entender el sentimiento de no querer llamar la atención innecesariamente, ¿verdad?»
Mostrando ligera tristeza en sus ojos color anochecer, Fianna suspiró.
«… Sí, es cierto… Lo siento.»
Claire apartó la mirada en disculpa.
Perseguida como la hermana menor de la Reina de la Calamidad, Claire podía simpatizar con los sentimientos de Fianna, quien había sido objeto de burla por el palacio imperial y llamada la Reina Perdida. Quizás Fianna todavía se sentía renuente a la exposición ante los ojos de esas personas presuntuosas de nuevo después de la recuperación de su poder como una princesa doncella.
«Hablando de eso, ¿no has trabajado a tiempo parcial antes, Claire?»
«Sí.»
Claire asintió. A pesar de que había dejado de trabajar con el fin de prepararse para el próximo Blade Dance, antes de que Kamito se transfiriera a la Academia, había estado trabajando. La gran cantidad de melocotones en conserva ocultos en su armario fueron aparentemente comprados utilizando sus salarios de tiempo parcial.
«¿Qué tipo de trabajo hiciste?»
«Tutoría privada para niños de familias de clase alta.»
«¿¡T-Tutoría privada!?»
«… Cielos, ¿qué pasa con su reacción?»
«Oh, nada, más que inesperado, es más como…»
Kamito se rascó la cabeza, vacilante.
«Yo estaba pensando que seguramente estabas trabajando como artesana de fabricación de carbón…»
«Estaba pensando en artesana de carbón también…»
«¿¡Qué diablos!?»
El cabello rojo de Claire se levantó como llamas.
«Bueno, oh ya veo… Es porque tus calificaciones son tan excepcionales, Claire.»
Así como dijo, el rango de Claire era sorprendentemente de primera clase en la Academia. Dado que nació muy talentosa ya, combinado con su propio arduo estudio.
«Fufu, tutora privada eh… Eso no es malo también.»
En ese momento, Fianna murmuró para sí misma, como si lo contemplara. Entonces…
«Fufu, ¿Kamito-kun?»
*Boing.* De repente, Kamito sintió una sensación elástica presionando su brazo izquierdo.
«¿¡…!? ¿¡Q-Qué estás haciendo, Fianna!?»
«Ya que estás en estudios de recuperación, Kamito-kun, déjame darte una tutoría privada ♪»
«… Eh, espera, ¿q-q-q-qué estás haciendo?, ¡Princesa pervertida!»
«No soy la princesa pervertida sino la maestra pervertida ♪»
«¡Deja de cambiar el tema!»
Claire gruñó y entró en una pose para expulsar a Fianna.
«¿Qué están haciendo, puedo preguntar?»
En ese momento, una voz llamó desde el otro extremo del pasillo.
«… ¿Rinslet?»
Kamito volteó su cabeza para ver a Rinslet con un libro en su mano, caminando con Carol.
«Fianna está buscando un trabajo de medio tiempo.»
«¿Su Alteza?»
Mientras Rinslet escuchaba con una ligera inclinación de su cabeza, Kamito explicó toda la historia.
«… Ahora veo. Busca un trabajo a tiempo parcial para no depender de un salario, qué admirablemente conmovedor.»
Rinslet juntó las manos frente a su pecho y asintió con la cabeza.
«Rinslet, no supongo que realmente hayas trabajado, ¿verdad?»
«Caray, tengo que hacerte saber que soy toda una experta en el plegado de anuncios publicitarios.»
Hmph. Rinslet infló su pecho.
«Milady ha recibido elogios en una convención de plegado de anuncios publicitarios.»
«¿Por qué una hija de la familia Laurenfrost estaría plegando anuncios…?»
«Descubrí que era divertido mientras estaba ayudando a Carol en su puesto de trabajo a tiempo parcial.»
«¿Por qué estaría una sirvienta tomando trabajos a tiempo parcial…?»
Sin prestar atención a Kamito que estaba cuestionando con los ojos entrecerrados, Rinslet volteó hacia Fianna.
«Su Alteza, si le agrada, ¿le gustaría que la presente a una tienda que conozco?»
«… ¿En serio? Sería una gran ayuda.»
«Sí, después de todo, esa tienda siempre se quejaba de falta de mano de obra. Voy a intentar ponerme en contacto con ellos después de la escuela.»
«Estoy tan contenta por ti, Fianna.»
«Sí, gracias. Rin… ¿slot-san?»
«¡Mi nombre es Rinslet Laurenfrost!»
El rostro de Rinslet se puso rojo, ofendida.
«Parece bastante divertido. Voy a echar un vistazo también.»
«Yo también, es preocuparse por lo que también voy.»
Parte 2
Con esto decidido, cuando el día siguiente llegó. Kamito y compañía llegaron a cierta tienda elegante recomendada por Rinslet, ubicada en la calle más transitada de la Ciudad Academia.
«Espera, no me digas que este lugar…»
Fianna susurró nerviosamente después de ver el cartel de la tienda.
«Sí, esta es la famosa tienda de dulces, el Royal Palace, cuya rama principal se encuentra en la capital del imperio.»
Rinslet peinó su cabello elegantemente y habló.
«… ¿P-P-Por qué tiene que ser una pastelería, entre todas las cosas?»
Kamito estaba tan asustado que estaba de rodillas en el suelo, agarrándose la cabeza.
«Kamito-san, ¿qué te pasa?»
«A-Arghhhhh…»
(… Hablando de eso, supongo que Rinslet todavía no sabe lo terrible que es la cocina de Fianna.)
Kamito se levantó tambaleándose.
«Oye Rinslet…»
«Kyah, ¿¡q-qué estás haciendo tan de repente!?»
Cuando Kamito intentó susurrar al oído de Rinslet, ella se estremeció ligeramente.
«… Lo siento, pero este lugar no va a funcionar. Fianna no puede cocinar en absoluto.»
«No te preocupes. Los chefs pasteleros aquí les enseñarán rápidamente, incluso si no tienes experiencia en la elaboración de productos de confitería.»
«No, ese no es el problema aquí…»
«Esperen, ¿acerca de qué están susurrando ustedes dos?»
«¡S-Sus rostros están demasiado cerca!»
Claire y Fianna miraron con enojo a Kamito.
Entonces sonó el timbre y la puerta de la tienda se abrió.
«…Oh.»
«Vengan, vengan, bienvenidas a la tienda, señoritas.»
Fuera de la tienda caminaba una mujer que se veía madura y confiable, vestida con un uniforme de chef blanco.
Ella parecía ser la dueña de esta tienda.
«Ya he oído los detalles de Rinslet-sama. Sí, sin duda serán de gran ayuda.»
«Gracias por cuidar de nosotros hoy.»
Rinslet inclinó cortésmente y presentó a la mujer a Kamito y las chicas.
«Ella solía ser la Gran Pâtissier [1] en el palacio imperial. Ella también es mi maestra en repostería.» [1] NT: Pastelera o repostera en francés.
«La maestra de Rinslet eh…»
«Llamarme maestra sería demasiado amable. Milady, usted inmediatamente me superó poco después de que comenzara su aprendizaje…»
«Vaya, no es necesaria tal adulación.»
Rinslet negó con la cabeza.
«Encantada de conocerla, Gran Pâtissier.»
Fianna se adelantó e hizo una reverencia educadamente.
Entonces Claire dio un paso hacia adelante también.
«U-Umm, ¿está bien… si me uno a aprender?»
«¿Tú también, Claire?»
«Umm, me gustaría… aprender a hacer dulces…»
Claire jugueteó con sus dedos mientras hablaba con torpeza…
«Además, e-el Festival de San Valentia está por llegar.»
«… Ah, eso es, sí.»
Fianna sonrió levemente.
«T-Tal cosa, qué es…»
«¿Hmm? ¿Es algo de qué hablar en frente de Kamito-kun?»
«… ~ H-Haah, n-no…»
Pequeñas chispas saltaron desde las puntas del cabello de Claire mientras su rostro se volvió rojo brillante.
La dueña de la tienda asintió con generosidad.
«Por qué, sin duda. No la voy a rechazar… Usted es quien contrató a un espíritu gato de fuego, ¿no es así?»
«S-Sí…»
«En ese caso, por favor diríjase al horno para cocer un poco de masa de galleta.»
«Ten cuidado y no carbonices las galletas.»
«¡N-No te preocupes, sé cómo hacer funcionar un horno al menos!»
Parte 3
«Entonces, Fianna-sama, por favor bata esta crema a continuación…»
Dentro de la cocina de la tienda de dulces de clase, el Royal Palace, las dos chicas estaban ahora vestidas con delantales y siendo instruidas por la Gran Pâtissier.
Fianna batió la crema en el recipiente hasta producir espuma mientras que Claire organizaba la masa de galletas en la bandeja del horno, una por una. Ella parecía bastante experimentada, en realidad.
(… En fin, supongo que no hay problema.)
Kamito las observaba desde un rincón de la cocina, finalmente pudiendo dar un suspiro de alivio. Dejando de lado a Claire, quien todavía no había empezado a utilizar el fuego, Fianna no parecía estar haciendo nada raro.
(… Ese real estofado blanco de la última vez debió haber sido un error.)
Se suponía que iba a ser algo creado para matar a Claire en primer lugar. Al juzgar por la forma en que iban las cosas, las chicas deberían lograr tener éxito en la cocina común.
«Aumenten, brasas—»
Después de poner toda la masa de galletas en la bandeja, Claire encendió el horno. El horno era un modelo caro que usaba cristales espirituales. Salamandras pequeñas fueron puestas en libertad para sostener un plato caliente.
… Un poco más tarde, un aroma muy apetitoso se emanaba de la cocina.
«… Wow, este aroma es increíble.»
De pronto, la espada en la cintura de Kamito brilló intensamente.
A continuación, una hermosa chica de cabello plateado apareció en la cocina.
«… Est, ¿qué pasó? ¿Por qué ahora?»
«Sí, me desperté porque olí un gran aroma.»
Est bostezó mientras se estiraba.
«Kamito, tengo hambre.»
Est se movió inquietamente y tiraba de la manga de Kamito.
«No comas sin permiso. Ten paciencia y voy a comprarte algunos para que puedas comer correctamente.»
«Sí, Kamito.»
Est asintió y comenzó a mirar las galletas en el horno.
Unos minutos más pasaron…
«La crema está hecha ♪»
Sujetando la taza con las dos manos, Fianna felizmente giró hacia Kamito.
«Wow, se ve bien hecho.»
El tazón estaba lleno de crema fresca… En fin, se veía bien al juzgar por la mera apariencia.
«Fufu, Kamito-kun, ¿te gustaría tener una probada? Es tan suave como mi pecho.»
*Boing.*
«… ¿¡Fianna!?»
«Bueno, entonces, vamos a probar el sabor…»
La dueña de la tienda se aclaró la garganta y tomó el tazón.
Puso una cucharada de la crema en su boca, ella entonces…
… Se congeló, así como así.
«¿…?»
Kamito usó su dedo para probar un poco de la crema también.
«¿C-Cómo está? Kamito-kun…»
«N-No tiene sabor…»
… Era como comer aire suave y esponjoso. ¡Qué increíble sabor!
«… Su Alteza, ¿cómo diablos hizo para hacer esto?»
«¿Cómo…? Simplemente recé para que se vuelva delicioso mientras agitaba normalmente, eso es todo, ¿supongo?»
Fianna explicó con una expresión de preocupación.
(… ¿No me digas que las oraciones de Fianna incluso tienen el efecto de la alteración de sabores?)
Talentosa como una princesa doncella de élite, si ella infunde sus pensamientos en su cocina, tal vez tendría un efecto como de un ritual mágico, alterando así el sabor.
«Hmm, esto es ligeramente imposible de usar…»
La dueña de la tienda comentó en voz baja con una expresión solemne, pero justo en ese momento…
«… ¡Haah!»
Un grito vino de atrás.
«¿¡Qué pasó, Claire!?» «¿Cuál es el problema?»
Cuando Kamito y las demás se dieron la vuelta…
«E-El espíritu de fuego en el horno de repente… ¡Eh, tú, detente ahora mismo!»
Dentro del enorme horno, innumerables salamandras estaban comiéndose las galletas.
«Claire, ¿¡qué hiciste!?»
«D-Debido a que no estaba lo suficientemente caliente, yo solo… añadí un poco más de potencia… ¡Uwah!»
Con la lengua deslizándose, las diminutas salamandras comieron todas las galletas en la bandeja. Luego abrieron la puerta del horno y corrieron afuera.
«Deténganse…»
Los innumerables espíritus de fuego comenzaron a llenarse a sí mismos con sus pasteles favoritos en la tienda sin restricción.
«Déjenmelo a mì. ¡Fenrir!»
Rinslet rápidamente levantó la mano y llamó a un gigantesco lobo blanco.
«¡Woof!»
«¡Congela a todos esos espíritus de fuego!»
«E-Espera, Rinslet—»
Kamito frenéticamente le habló para detenerla, pero fue demasiado tarde…
Fenrir abrió sus fauces y liberó una tormenta feroz hacia los espíritus de fuego que estaban fuera de control por todo el lugar.
Los espíritus de fuego fueron inmediatamente congelados. Convirtiéndose en partículas de luz, que se desvanecieron en el aire.
«Uf~ Eso probablemente resuelva el problema… ¿Dios mío?»
«… ¡Ahhhhh, todos los pasteles de hoy están arruinados…!»
Dentro de la cocina que estaba congelada en hielo, la dueña de la tienda se desmayó del shock.
Parte 4
… Como resultado, el trabajo a tiempo parcial en el Royal Palace tuvo que ser suspendido.
Dado que la propietaria se desmayó del shock, Rinslet y el resto del personal actualmente estaban apresurándose para hacer pasteles desesperadamente.
Sintiéndose responsable, Claire compró todos los pasteles arruinados.
«… Haaa, ¿soy incapaz de hacer otra cosa que no sea cenizas?»
Claire estaba caminando en la Ciudad Academia en depresión. Sus vivaces coletas también parecían marchitas. Su estado de ánimo estaba por los suelos.
«Bueno, esto sucede a veces. ¿No eché a perder la crema también?»
Fianna le dio unas palmaditas en el hombro, tratando de animar a Claire.
«Ooh, Fianna… nunca supe que fueras tan buena persona…»
«… No, no, no llores. Pero ¿qué vamos a hacer ahora…?»
«Bueno, vamos a buscar alrededor con paciencia. Encontraremos algo.»
Dijo Kamito. Entonces en ese momento…
«Si les place, ¿les gustaría que los presente a la tienda donde trabajo?»
«… Carol, ¿¡cuándo llegaste!?»
Carol apareció de repente delante del grupo de Kamito mientras caminaban.
«Las sirvientas pueden aparecer en cualquier momento, no importa dónde.»
Carol sonrió.
«¿No tienes que estar con Rinslet?»
«Hmm, no puedo ayudarla mucho de todos modos.»
«Qué directa…»
Kamito entrecerró los ojos para preguntar luego suspiró levemente.
«Por cierto, ¿en qué tienda trabajas, Carol?»
Claire frunció el ceño y preguntó.
«Un café en la Ciudad Academia. Como camarera.»
«Tu trabajo debe ser servir a Rinslet, ¿cierto?»
«Sólo es un trabajo extra y milady dio su permiso.»
«Más bien, me gustaría llegar a ser una sirvienta Laurenfrost.»
Fianna murmuró en voz baja.
«Pero ser una camarera parece muy divertido.»
«… Cierto. Si es sólo servir a los clientes fuera de la cocina, no debería ser un problema, ¿cierto?»
«Genial, Carol, ¿podrías presentarnos?»
«¡Sí, déjenmelo a mí!»
Parte 5
La tienda que Carol recomendó era un gran café llamado Annerose, situado en el centro de la Ciudad Academia.
Ya que ellos cuatro parecían respetables, para empezar, además de la recomendación de Carol, todos ellos fueron contratados después de una simple entrevista.
«Fufu, este es realmente un uniforme bastante lindo ♪»
Cuando Fianna giró alrededor, la falda de su uniforme revoloteó ligeramente.
«… ¿Pero por qué, incluso yo…?»
Claire miró a su pequeño pecho y murmuró. Ya que el uniforme de Annerose contaba con escotes bajos, este conjunto hacía el tamaño de su pecho aún más evidente.
«¿Cómo vas a pagar por los pasteles arruinados?»
«B-Bueno…»
Claire estaba pérdida en sus palabras. Entonces…
«… Yo soy el más trágico aquí.»
Entrando en la sala con una cara de desesperación estaba…
Kamito en un uniforme de camarera.
«¿¡K-Kamito!?»
«Dios mío, Kamito-kun, eso realmente te queda bien…»
«Gah…»
Kamito bramó infelizmente.
En cualquier caso, las cosas se habían desarrollado hasta este punto. La intención original de Kamito era hacer lavado de platos y similares en la cocina, por lo que aceptó la entrevista, pero por alguna razón, la dueña de la tienda de inmediato le entregó un uniforme de camarera al verlo.
«Umm, Kamito… Estas muy… linda.»
«Eso no me hace sentir mejor.»
Kamito gruñó.
«Mira, Kamito-kun…»
Fianna sonrió ligeramente y se acercó a él, entonces…
«Tu cuello es un desastre.»
De pie de puntillas, Fianna juntó la cinta de Kamito y la ató.
«L-Lo siento…»
«Espera, ¿qué estás haciendo? ¡Tú princesa pervertida!»
Claire levantó airadamente su voz en protesta.
«Kamito, ¿esto se ve bien?»
A continuación, una pequeña voz vino de detrás en ese momento.
Vestida con un uniforme, Est inexpresivamente se paró frente a la barra.
«S-Sí…»
«Los calcetines son demasiado cortos… Me siento muy avergonzada…»
Empujando su falda, Est cubrió torpemente sus muslos. En lugar de sus habituales medias a la rodilla, llevaba calcetines hasta el tobillo más cortos.
Dado que al propietario también le gustó Est, también estaba trabajando aquí.
«… Se ve muy bien en ti.»
«Estoy muy feliz, Kamito.»
«… Muuu~, consientes demasiado a Est.»
«Ciertamente…»
Fianna coincidió con Claire que hacía pucheros.
«¡Ya es hora todos, vayan a trabajar!»
Carol dio unas palmadas y entró en la sala con el propietario.
«Wow, todo el mundo se ve muy bien en esos uniformes. ¡Ya que Carol los recomienda, puedo dejar el trabajo a ustedes sin tener que preocuparme!»
«Parece que Carol realmente trabaja muy en serio aquí.»
«Sí, qué inesperado…»
Kamito comentó en voz baja y Claire asintió con la cabeza ligeramente.
«Por favor, vean su comportamiento, ustedes dos.»
Kamito y Claire no pudieron evitar enderezar la espalda frente a la sonriente Carol.
Parte 6
Un rato después de que Kamito y compañía comenzaran a trabajar en el café…
«D-Debería estar bien, ¿cierto?»
En frente del café Annerose, una figura inquieta apareció.
Llevaba un sombrero de plumas y un manto suave y esponjoso, mientras que su rostro estaba oculto por un par de súper grandes gafas de sol. Ella estaba mirando en el interior a través de la ventana. El cabello rubio visible bajo su sombrero se balanceaba suavemente.
Por supuesto, era Rinslet.
Usando su poder como experta pastelera, sólo le llevó alrededor de una hora para terminar todos los pasteles. Poniéndose un disfraz, ella en secreto llegó a ver cómo Claire y los demás lo estaban haciendo.
Justo cuando estaba mirando a la tienda como un bicho raro…
«¿Qué estás haciendo?»
Una voz de pronto vino desde atrás. Asustado, el cuerpo entero de Rinslet se sacudió.
«… N-No es como que si estuviera preocupada por Claire… Huh…»
Rinslet miró hacia atrás y de repente quedó sin habla por un momento.
Parada estaba una chica a quien ella conocía.
«… ¿¡Capitana!?»
Ellis Fahrengart. La capitana de las Caballeros Sylphid quienes resguardaban la disciplina pública en la Academia.
Parecía que estaba de patrulla con una espada en su cintura.
Ellis frunció el ceño y desvió la mirada hacia el café.
Entonces notó caras conocidas en el interior.
«… ¿Qué, la princesa está trabajando aquí?»
Ella murmuró con una expresión solemne.
«Aunque la Academia no prohíba trabajar a tiempo parcial, ¿p-pero ese uniforme no es excesivamente descarado?»
Ellis pensó ligeramente por un momento.
«Hmm, esto exige una investigación.»
Asintiendo con firmeza, ella entró en el café.
«Oh, capitana…»
Rinslet persiguió a Ellis en la tienda.
Parte 7
«… ¿Hmm? Esas chicas, son Ellis… ¿y Rinslet?»
En el salón sirviendo bebidas, Kamito las vio entrar en el café y arqueó las cejas.
Dejando de lado a Ellis, los gustos de Rinslet eran verdaderamente raros. A pesar de que se había disfrazado con un sombrero y gafas de sol, su verdadera identidad ya estaba completamente expuesta.
(… ¿Podría ser que ella vino a revisar ya que está preocupada por Claire?)
Kamito se acercó a las dos chicas cerca de la entrada y las llamó.
«Ellis, Rinslet, ¿qué diablos están haciendo?»
«¿Hmm…? ¿Por qué sabes mi nombre?» «¿C-Cómo conoces mi verdadera identidad…?»
Las dos chicas respondieron al mismo tiempo.
Kamito se encogió de hombros y les susurró en voz baja para que sólo las dos chicas pudieran oír.
«… Soy yo.»
«¿Kamito?» «… ¿¡Kamito-san!?»
Ellas abrieron sus ojos y miraron a la cara de Kamito atentamente.
Entonces finalmente, se dieron cuenta de que esta camarera parecía ser Kamito.
«E-Ese atuendo, ¿¡qué diablos está pasando!?»
«¿¡N-Nunca supe que tenías tal afición!?»
«… ¡E-Están totalmente equivocadas!»
Kamito gritó súbitamente en pánico, provocando que los clientes de los alrededores miraran para ver lo que estaba sucediendo.
«No, bueno, es debido a circunstancias especiales…»
Tosiendo. Kamito se aclaró la garganta y les explicó toda la historia a Rinslet y a Ellis.
«… Ya veo. Es verdaderamente lamentable.»
«Y me preguntaba si te travestías con regularidad.»
«Todo eso pasó hace tres años…»
«¿Hace tres años?»
Ellis miró con sorpresa al Kamito accidentalmente suelto de lengua.
«… Oh, nada… Por cierto, Rinslet, ¿están las cosas bien en el lado de la pastelería?»
Kamito cambió apresuradamente el tema.
«Fufu, por supuesto. Yo compensé los pasteles en ruinas correctamente.»
Rinslet hinchó su pecho con orgullo.
«Vine a ver si Claire está trabajando correctamente.»
Miró a Claire que estaba trabajando en el salón.
«Le gustaría el estofado de ternera con omelet de arroz, al cliente del otro lado le gustaría un curry de mariscos, mientras que a los dos de al lado les gustaría el set de pan y café y el set de té negro y tarta respectivamente, sin leche para cualquiera de ustedes…»
Claire se movió hacia atrás y adelante entre la cocina y el salón en un espectáculo deslumbrante.
«Ella recuerda claramente solo escuchando una vez…»
«Sus calificaciones son realmente excelentes en la escuela.»
Rinslet comentó con orgullo por alguna razón.
«Wow, esa chica es tan linda ♪»
Voces estridentes se oían desde el fondo del café en este momento.
«¡Aquí tienes!» «Este también, este~» «Aquí, di ah ~ ♪»
Vestida con un uniforme de camarera, Est estaba siendo alimentada por los clientes.
«¿Qué está haciendo Est…?»
«Ten, di ah~ Sí, me gustaría mucho darle más de comer. Por favor, otra orden de bollos de crema ♪»
«Una orden de bollos de crema, viniendo de inmediato.»
Tomando las órdenes en el lado estaba la sonriente Carol.
Kamito sonrió irónicamente y luego miró a Fianna que estaba trabajando en otro rincón de la sala.
«Eh, una orden de pan de naranja y una taza de té negro, ¿cierto?»
«Equivocado, pedí té con leche.»
«L-Lo siento mucho…»
A pesar de que tartamudeaba un poco, Fianna parecía que estaba poniendo un montón de esfuerzo. Ninguno de los clientes probablemente reconoció su rostro como la Segunda Princesa.
(Este trabajo debe estar bien, supongo.)
Cuando Kamito dio un suspiro de alivio…
«Oh, no es esa su alteza la antigua Segunda Princesa…»
«¿¡…!?»
Debido a esta voz repentina, Fianna se sorprendió y dejó de caminar.
El que hablaba era un anciano aristócrata sofisticadamente vestido sentado en el otro extremo de la mesa.
«Ah, claro, en lugar de la Segunda Princesa, ¿debería llamarla Reina Perdida, no?»
El café de repente se quedó en silencio debido al tono de burla del anciano aristócrata.
«… ¿Quién es ese?»
«Ese debe ser el Conde Rondo.»
«Él es un noble de alto rango que sirve como el Ministro de Hacienda en la capital imperial. Él está, probablemente, inspeccionando la Ciudad Academia.»
«Un noble de la corte imperial eh…»
Kamito chasqueó la lengua en su mente. Llamada la Reina Perdida en el pasado, Fianna había sido herida por los rumores secretos entre los nobles en el palacio difamándola. Precisamente por eso, Fianna había cerrado su corazón, decidiendo no preocuparse por todo lo que la rodeaba. Durante los últimos cuatro años, ella se había encerrado en el palacio sin salir.
«En serio, hasta dónde has caído. Pensar que la princesa que mostró tanta promesa como candidata a Reina serviría a los demás en este tipo de lugar.»
Fianna se quedó congelada con el rostro pálido. Sus hombros temblaban ligeramente y su respiración se había acelerado. Estas palabras crueles desgarraban profundamente las cicatrices formadas en su corazón cuando vivió como una reclusa en el palacio.
«Fianna—»
Así cuando Kamito estaba a punto de correr hacia Fianna, Rinslet lo agarró del brazo.
«… Kamito-san, no se preocupe.»
«¿Eh?»
Y justo en este momento…
«Aquí está su té rojo—»
En frente del conde, una taza llena de té negro se colocó bruscamente sobre la mesa.
Esta taza de té negro estaba hirviendo y burbujeando como lava.
«¿¡Qué diablos es esto!?»
«Bebe esto ahora y piérdete. O si no te convertiré en cenizas.»
«¡…!»
Debido a que Claire estaba exudando ira de todo su cuerpo, el conde involuntariamente tragó saliva.
«H-Hmph, como si alguien necesitara visitar este tipo de tienda dos veces…»
Después de decir ese diálogo con resignación, se apresuró para pagar su cuenta sobre la mesa y salió corriendo del café en pánico.
«… ¿Claire?»
Ya no aturdida por fin, Fianna volteó y miró a Claire.
Claire evitó el contacto visual en vergüenza.
«H-Hmph, no tengas una idea equivocada. Yo simplemente odio a los tipos como ese…»
Como si no hubiera pasado nada, Claire volvió a su puesto.
Parte 8
Después de terminar su trabajo en Annerose pacíficamente, en el camino de regreso a los dormitorios…
Kamito y compañía estaban caminando en un camino empedrado bajo la luz de la luna.
«Fianna, ¿por qué no me invitas algo con tu salario?»
«¿No recibiste un salario también, Claire?»
«M-Mi salario fue gastado en el pago de esos pasteles…»
«Oh, es cierto…»
Fianna sonrió irónicamente a Claire que colgaba su cabeza en depresión.
«Fianna, te ves muy feliz.»
«Fufu, ¿es así?»
Fianna miró hacia atrás, su expresión era…
En comparación con sus sonrisas traviesas en el pasado, era puramente una sonrisa inocente.
Mientras Kamito no podía dejar de mirarla hipnotizado…
«… En ese entonces, yo realmente estaba muy asustada.»
Fianna murmuró.
«… ¿Muy asustada?»
Kamito y Claire ambos respondieron al mismo tiempo.
Fianna asintió con firmeza.
«… Sí. La verdad, cuando inicialmente tomé la decisión de trabajar afuera, aunque fuera parcialmente por dinero, yo también estaba tratando de decir adiós a mi yo del pasado que se mantenía oculta en el palacio, escapando de la realidad…»
Fianna miró en la distancia mientras hablaba.
«… Ya veo.»
Frente a Kamito y las demás, Fianna siempre actuaba alegre y sabia.
Pero, en realidad, era una chica delicada que era herida con facilidad. Por lo tanto, cuando ella abandonó todo para huir de palacio y venir a la Academia, ella probablemente selló todas esas diversas memorias en el fondo de su corazón.
«Pero no te preocupes, porque ya no estoy sola…»
«Fianna…»
Fianna secó sus lágrimas y luego mostró una habitual sonrisa pícara en su rostro.
«Voy a invitarles a ustedes dos esta noche. ¿Dónde deberíamos comer?»
«¿En serio? Que tal…»
Claire se detuvo y se dio la vuelta.
«Realmente no me importa, pero Rinslet, tu disfraz falló hace mucho tiempo.»
«¡N-No, en absoluto, no es como si te estuviera siguiendo!»
Originalmente escondiéndose detrás de una columna, Rinslet apareció.
«Lo que sea, sólo ven con nosotros. Fianna dice que nos va a invitar.»
«Sí, estoy bien con eso.»
«… S-Si ustedes lo dicen, entonces y-yo los acompañaré ♪»
Quitándose sus gafas de sol y el sombrero raro, Rinslet corrió en euforia.
Entonces la espada colgando en la cintura de Kamito brilló.
«… Kamito, me desperté también.»
«… Est, ¿no estaba la gente alimentándote justo ahora? ¿¡Todavía puedes comer!?»
Rodeada por sus amigos, Fianna entonces…
«Ya no estoy sola…»
Con una voz demasiado silenciosa para que cualquiera pudiera escuchar, ella secretamente se susurró a sí misma.
HiroLsn Translations - Lector 